Tánger, situada en el norte de Marruecos, es conocida como la puerta de África, donde el océano Atlántico se encuentra con el mar Mediterráneo en el estrecho de Gibraltar. Su ubicación estratégica le ha dado una historia fascinante, marcada por la mezcla de culturas europeas, árabes y africanas.
La medina de Tánger es un laberinto de callejones con zocos llenos de artesanía, cafeterías tradicionales y miradores con vistas al mar. Entre sus lugares emblemáticos destacan la Kasbah, el Gran Zoco, el Cabo Espartel y las famosas Cuevas de Hércules, uno de los símbolos de la ciudad.
Además de su riqueza histórica, Tánger cuenta con modernas avenidas, playas urbanas y un puerto renovado que conecta con Europa en pocas horas.